Stalemate

domingo, febrero 08, 2009

Ni por delante, ni por detrás, ni por ningún lado. Sólo que sabes bien que no me estoy escondiendo.
No sé en qué dirección moverme, y temo lo que dirán los dados. Algo me dice que igual voy a perder; y mientras tanto, tu sólo sonríes. ¿Por qué haces trampa con chistes y canciones, y caricias y besos ilícitos?
No hay reglas, se hace lo que se puede y por algún motivo que todavía no comprendo: amo este juego. Nunca estuvo claro si eres mi contrincante o mi aliado, pero sé que hace falta un árbitro.
Si lograra dejar de pensar en tí, depronto alcanzaría esa meta difusa que todavía ni sé dónde queda; o depronto guardaría las fichas y saldría a caminar tranquilamente.
Pero mientras siga creyendo que el azar es sólo el presente burlándose de nosotros, prefiero arriesgarme, y decirte lo mucho que te quiero. A ver si existe esa vaga ilusión de que vengas algún día despojado de tus trucos y secretos, para que yo pueda aceptar abiertamente que tú también en algún sentido juegas a quererme.

"Mi estragedia es
que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto
por fin me necesites"
-Mario Benedetti

¡Tu turno!