Sleepless Nights
lunes, diciembre 03, 2007
Hand in Hand
sábado, noviembre 03, 2007
with tears from below the heart,
I opened the door to leave and
you briefly grasped my hand...
I wish that you could keep it
but I lack the will to speak it.
Excusa para un Ensayo
sábado, octubre 20, 2007
Para que todos entendieramos
Que desde acá ya estamos
Más allá de lo divino.
Cada acción es inmanente,
Pero más importa la luz que refleja
O la eterna huella que deja
El ejercicio de la mente.
Nos han enseñado una teoría,
Pero olvidamos que en realidad
El secreto esta en la memoria.
No se puede asegurar una deidad,
Pero palabras de trascendencia
Son palabras que viven de verdad.
Sonnet I
martes, octubre 16, 2007
A sip from the cup you lend
Holds betrayal as my venomous end.
By poison I have been slain, it is no other illness.
I did not know what fate would hold.
Too quickly acts this cursed wine,
It rips my soul and breath from time.
As love, through treason, becomes cold.
Like a candle’s light extinguished
My life’s been blown away.
In mortal figure I here lay
As my story thus is finished.
I hope your life’s something worth more than a thousand years’ deceit
For me there is no remedy, for through the heart I have been hit.
Slide the Night
lunes, septiembre 10, 2007
Fénix
jueves, septiembre 06, 2007
La niña creció y se convirtió en mujer, mientras el ave no perdía ni una pluma y los anos parecían solo pasar por su lado. Con el cabo del tiempo la muchacha cada vez cruzaba menos a menudo el mágico jardín, hasta que nunca volvió. El ave se lleno de tristeza y solo anhelaba el día en que las llamas lo consumieran. Esperaba la combustión espontánea de sus emociones. Los días pasaron y su aflicción ahogo su canción.
Una mañana, creyó ver a la niña a quien amaba. La vio venir y con ansias esperaba que se acercara, sin embargo algo mas parecía estar en su mente, y ella repentinamente dio vuelta y corrió lejos de allí. Una vez mas devastado, pidió muchas veces el fuego.
Días más tarde, el ave despertó al alba oyendo un tarareo que se acercaba. Abrió sus ojos a la luz y sintió que se llenaba el vacío que había tenido por tanto tiempo dentro de si. Aquella sonrisa se hacia canto. La mujer que se avecinaba, con su cabello desarreglado y hermoso irradiaba la energía de la canción que había sido suya hacia tanto tiempo.
En ese momento, el fénix sintió lo que había añorado, pero que ahora temía. Su cuerpo se calentó y en instantes era un incendio que consumía plumas, jardín y niña. El amor ardió.
El viento que cargaba las cenizas traía consigo a su vez una minúscula vocecita de niña. A medida que el estruendo de las llamas se opacaba, el temor en la voz aumentaba. Llantos danzaban al rededor de las cenizas. A medida que las lagrimas de la pequeña comenzaron a llover sobre el suelo, una melodía empezó a irradiar tímidamente. El inicio de un círculo sin fin mostró su rostro de pichón. La canción distrajo a la niña quien se pregunto de donde venia. Al cabo de un tiempo de estar escuchando, tomo conciencia de que era un júbilo por todos aquellos que habían amado a su madre.
El nuevo fénix hallo a la niña entre la densidad del aire y viendo una sonrisa formarse en las esquinas de su boca sintió que un ángel lo había invitado a comenzar de nuevo. A pesar de no recordar nada previo a su cenizo origen, el ave sabia que amor existía y que su canción lo preservaría.
Sin Palabras
miércoles, agosto 08, 2007
Como un rio sin agua,
Bailarin sin zapatillas,
Como tierra sin semillas.
Como rosa sin petalos,
Como mano sin dedos,
Viajero sin destino,
Como copa sin vino.
Como un bebe sin cuna,
Como la tierra sin su luna,
O un hombre sin un nombre,
Como un corazon de cobre.
Fatal Word
jueves, julio 12, 2007
Grandpa walked into the room as calmly as ever. He ignored mu unstable mother and instead approached us. We were nervous about what he would say too, since Father left he had become rather silent. His eyes immediately fixed upon my closed fist. He grabbed my arm and forced my hand open, he quickly snatched the crumbled paper and before either of us could protest, turned his back and strode away.
My brother gave me a nudge whose meaning I could not ignore. I trotted behind Grandpa and as I caught up with him he spun around. I guess he could see the question in my face, for he solemnly spoke,
"About this word," he said pointing at the paper, "I shall say no word."
I stood there, knowing there was no case, and Grandpa walked away.
I went back into the room and in response to my brother's anxious face I just shook my head and climbed into my bed. There wouldn't be much rest tonight, I knew, yet I was desperate for it. Brother turned off the light, but did not move for a while, and even through the darkness I could feel his cold stare. Then he walked towards my bed, not his, and knelt beside me.
"It is no secret," he spoke softly. "That word, the Fatal Word." I gave him only a sleepy grunt in response, but he went on, "I memorized it, I can speak it."
The air suddenly seemed colder and I sat upright to face him.
"What?" I asked incredulously. "Brother just leave it, didn't you see all the fuss Mother made earlier. It must be the Fatal Word for some reason. Just go to sleep."
"No. You're just saying that because you're scared. Well, I may be the youngest, but then I am also the bravest. I'm not afraid of anything."
"I'm not afraid either! I just don't trust what I don't know..." The room fell silent for a while and then I broke the chill between us by asking, "Why are you so interested in it anyways?"
Brother seemed to think twice of it before answering, then he said, "I dunno. I'm just curious I guess. Why should it be unspeakable?" Then he stood up and his expression seemed to change from curiosity to resolution. He spoke in a defiant tone, "I'm gonna do it. I'm gonna say it."
I felt too tired to express actual interest in this new dare my brother was imposing. I simply mumbled, "Give it a rest, please." But he seemed not to hear me.
"D... d... d.... dea," he seemed to be quivering all of a sudden, he shook as if the word was struggling not to come out of him.
"Stop!" I said, but it was too late.
"DEATH!" He managed to utter, and before the word had left his pale lips, his eyes shone with a red glare and he quickly sank into the floor with a ghostly wail. A light mist seemed to cover his still body, and then rapidly diffuse around the dark room.
I gave a scream and dropped next to him. His body was awfully cold. I kept yelling, and ever more violently as I saw my brother's blank expression.
Then, the door burst oped and Grandpa came in. His face was horror stricken as he saw us on the floor. Then Mother came in too, and her scream was even more unbearable than mine. She cried all sorts of incomprehensible things. I could not hear any of it. Panic flooded my insides and nothing made any sense.
I looked up to my mother who was uncontrollable, then to my grandfather who was unmovable, and lastly to my younger brother who was beyond all of us, now part of another world. A world linked to us only through one Fatal Word.
Secretos para un fin de semana
miércoles, junio 20, 2007
Los lazos de sangre son nudos ciegos. Por eso entre familia se ve a las personas con una comprensión mas allá de los sentidos. Por eso nadie deja de quererte.
El que trazó las carreteras colombianas tenía menos pulso que quien hizo las montanas que atraviesan. Todo contribuye a un mareo ineludible que entre el dolor de cuello y el sueño que no se alcanza termina obligándote a olvidar si la derecha es la izquierda o en que sentido vas.
Las montanas están hechas de algo más que papel maché, tienen un calor que llena el aire y delimita el cielo, apretándote en un protectivo abrazo.
Consigue a alguien que sujete tu mano cuando la montaña esconda al sol y el viento llame tu nombre desde más allá del precipicio, por que en este momento tu cordura no dará abasto.
Pocas son las noches en que la luna te sonríe, sin embargo nunca puede faltar que tú le sonrías a ella.
El camino continúa y tú eres inmune siempre y cuando las ruedas rueden.
Llegas a aquel pueblito pequeñito de piedras viejas y personas rasgadas, somos huéspedes de la cultura perenne de cada rincón.
Río abajo va tu cuerpo, pero ni las rocas ni el agua son amenaza cuando tu tranquilidad está a flote.
Noches de polvo: un buen libro, una buena canción, y caíste sin sentirlo y las velas se quedaron esperando el soplido.
¡No olvidar que para el paseo del día siguiente hay que madrugar a las 11!
Levántate a caminar entre piedras; no se sabe si han sido repartidas al azar o si alguien las regó por el lugar a propósito con ánimos de decorar el paisaje con prehistoria.
Caminito de tierrita, no importa como, los pies igual rinden.
En la cueva, da lo mismo abrir que cerrar los ojos. Tus pulmones inhalan oscuridad mientras tu corazón reta a los milenios que formaron tal error.
Parece mentira salir a respirar aire del cielo, encontrarse de nuevo en la superficie de lo real, de lo terreno.
El firmamento ruge y cruje en el clímax del enfado. Amenaza con su cortina de lluvia que flamea en el viento, y gotas que juegan a ser balas perdidas.
El acercamiento a la sencillez no podía ser más impactante, por que bajo una tormenta, todos agradecemos un techo por encima de nuestras cabezas, sin importar las diferencias.
Vuelves a recordar lo fácil que era caerse, lo fácil que era reírse, y como ante un extraño no hay nada mas confortante de que un abrazo de tu mamá o agarrarse de la falda de la abuelita.
Manejando en contra del río, se pierde la cuenta de todo lo que ha caído, todo lo que va cuesta abajo y que nunca volverás a vivir.
De regreso a casa, una vez más bajo la noche, ves como las distantes luces de una que otra casita en las montañas se confunden armoniosamente con las estrellas en el firmamento.
Y piensas en lo sorpresivo que es el cielo y como se transforma cada momento. Sea azul, blanco, rojizo, claro, oscuro, estrellado, lunado, soleado, nublado, cargado, despejado, siempre es el mismo cielo, mirando de cualquier lado.
Sand Castle
miércoles, mayo 23, 2007
Playing on shore,
Needless of toys,
They don't ask for more.
Barefoot the lie,
Playing with sand.
The waves rush by
To the edge of the land.
A castle they built
With windows and towers,
Made out of filth,
Home to kings of great power.
As soon as they finished,
The water made way,
The fortress diminished,
Their efforts were washed away.
No la ví
lunes, mayo 07, 2007
Encuentros
martes, abril 10, 2007
Hoy iba en la buseta del colegio a mi casa, y ví botada en la calle y medio rota, lo que parecía ser una caja de esas en donde se guardan los naipes. Pensé en que tal vez alguien había renunciado al vicio. Pero luego me dí cuenta de que la caja estaba vacía, y las cartas probablemente estaban molestando a alguna mamá que ya no sabe dónde guardarlas para que no se pierdan.
En un semáforo, ordinario como cualquiera, había una pareja de viejitos vendiendo frutas. La venta no tenía nada de espectacular, era bastante humilde, y hasta creo que los mangos estaban mayugados. El viejo con una barba canosa y una sonrisa fiel, pero su piel se veia claramente maltratada por el día tras día, de sol y trabajo. La mujer, con un vestido corto y playero, pero de tela de flores anticuadas, contrastaba una sencilla contemporaneidad contra lo antiguo de su perfil, combinados en un trájín de suciedad. La pareja estaba sentada a la sombra de un árbol, sobre las mismas cajas de madera a medio armar en donde se trasportan las frutas, y cada uno terminaba de comer lo que parecía una empanada. Humildes, pero juntos, en medio del tráfico y la fatiga del trabajo. Mi vehículo arrancó y yo solo traté de disuadirme ante la posibilidad de que eran las tres de la tarde y esa empanada era posiblemente el único almuerzo de esas personas.
Hace casi un año y medio, una amiga me enseñó a adivinar quién puede estar pensando en mí, dependiendo de las placas de los carros. Es un juego mas bien tonto, que en realidad sólo sirve para que yo piense en aquella persona, independiente de si la fotuna coincide en que piensen en mí. Sin embargo, me aterra como aún hoy en día me encuentro con el azar, quien dicta su nombre repetidas veces. Espero ser yo la obscesionada, por que dudo que seas tú ahora.
Anoche me encontre con un timbre, incesante, intento de comunicación, insistente, por un largo rato, yo impaciente. Y por sólo un segundo oí tu voz. La conección se rompió de súbito. Volví a llamar, y no contestaste. ¿Te distraiste? Yo me desesperé y me resigné a no poder dormir.
Hoy caminé media cuadra, y no pude evitar notar que en aquel tramo, estubiera tirado en el andén un avioncito de papel periódico. Fue como si alguien lo hubiera puesto ahí a propósito para que yo pasara y sonriera pensando en de cuáles manos despegó: de pronto un niño, de pronto un adulto, de pronto tú.
Cada rincón esconde un detalle, cada detalle una historia, y cada historia un corazón.
Quizzes
lunes, abril 09, 2007
You Are Surrealism
Dreamy and idealistic, you've created a world that is all your own.It's very likely that you've either dabbled in drugs or are naturally trippy.You are always trying to push beyond the boundaries of your culture and society.You believe that art, love, and freedom can change the world.
You Are 64% Obsessive
You tend to have obsessive thoughts, and sometimes these cross over into your daily life.While everyone does have a few weird rituals, you have to work to keep yours from taking over your life.
How honest are you?
(¡Que fácil es decir mentiras por internet!)
You Are Somewhat Honest
You do tend to tell the truth a lotBut you also stretch the truth on occasionYou figure a little lie isn't a big deal. As long as it doesn't hurt anyone too much!
Your Love Style is Storge
For you, love and friendship are almost the same thingAnd your love tends to be the enduring, long lasting kind(You've been known to still have connections with exes)But sometimes your love is not the most passionate. Leap before you look, and you'll find that fire you crave.
Your Halloween Costume Should Be A Girl Scout
What kind of Easter egg are you?
You Are an Egg that Looks Like a Chicken
Cute but totally completely confused.
What color should you paint your room?
You Should Paint Your Room Blue
Peaceful and soothing, blue rooms have been known to reduce blood pressure.Your blue room will encourage deep rest and great sleep.A blue room is the perfect oasis for a stressful life.
What rejected crayon are you?
(Nótese que para este quiz, la única prengunta era "What color underwear are you wearing?", y mi respuesta no coincide con el resultado.)
You are
Y otros cuantos que no me digné a hacer, con títulos cómo:
How much is your life worth?
Could you pass 8th grade math?
What kind of panties are you?
What's your pizza personality?
Are you a Socialist or a Capitalist?
What kind of sexy girl are you?
Are you socially anxious?
What kind of Christmas ornament are you?
How much life experience do you have?
Entonces, si tienes problemas ubicando tu personalidad, toma un quiz, o varios. Te darás cuenta, como yo, de lo absurdo que es que un programa digital pretenda saber quién o cómo eres sólo por que respondiste unas pregunticas. Y te preguntarás cuántas personas desocupadas y desubicadas hay en el mundo que creen en los quizzes de personalidad, como para que exsitan tantos!
Crea tus propios resultados y, ¡defínete a tí mismo!
Todos los detalles provienen de http://www.blogthings.com/
...Y han sido tomados sin permiso.
Silence
lunes, marzo 19, 2007
The guests are too shy.
The barrier was built
From silence and guilt.
They used to be free
Before they sat down for tea,
But now they are doomed
And by stillness consumed.
Luz de Día
martes, marzo 13, 2007
Pinocho el Gusanito Medidor
lunes, febrero 26, 2007
-¡Hola saltamontes!
-¡Hola, gusanito medidor! Jajaja... Me gustaría saber ¿A que se debe ese saludo?
-Pues por el saltarín de su casa.
-OK.
-¿Y lo de gusanito?
-Jajaja... No sé, fue como lo primero que se me ocurrió. Pero entonces no creo en el azar, y debe tener algún entendimiento subconsciente.
-Mmm... Bueno, sonó chévere.
-Son lo más de bonitos. De chiquita me encantaba jugar con ellos.
-¿Cuáles son? ¿Esos que son como verdecitos todos raros?
-¡Jaja! ¡Si! ¡Igualito!
-¡Jejejeje!
Después de reirse un rato, él se detuvo a mirar su creación, y con un tono más asustado que asombrado dijo,
-Uy... El dibujo que hice, ¿se está moviendo o es mi impresión?
Ella también se enfocó en mirarlo fijamente, y sorprendida encontró que era cierto. Parte de la curva superior del gusanito que su amigo había pintado se movía ligeramente, casi como si tuviese un tic.
-¡Si! ¡Se mueve! ¡Que miedo!
-Y sólo lo dibujé...
-¡Da miedo en serio!
-Que raro, se sigue moviendo.
-¿Cómo lo hiciste? ¡Está vivo! ¡Lo juro!
-Si, está vivo.
-Y sabes, es como si estuviera luchando, para salirse de lugar. Algo quiere medir, como la distancia entre nosotros dos. Pero está atrapado en el blanco espacio virtual...
Después de unos minutos de reflexión, ella volvió a la conversación para decir:
-Se va a llamar Pinocho, nuestro gusanito.
-Jajaja, ¿Pinocho?
-Pinocho, por que quería ser un niño de verdad, y este quiere ser un gusano de verdad.
-Jejejeje... Yo le estaba buscando una nariz al gusanito y ver si eso era lo que se estaba moviendo, lo que le estaba creciendo.
-Jaja, ¡No! Este gusanito no dice mentiras.
-No, por supuesto que no.
Un breve momento después, él agregó:
-No sé si dejar el computador prendido de ahora en adelante. ¡Cuando cerremos esta ventana, morirá!
-Ya le pusimos nombre. Creo que nos estamos encariñando. ¡No lo podemos matar así no mas!
Ella también se tomó un momento para hacer alguna otra cosa, y de regreso dijo con emoción:
-Que ternurita... Creo que Pinocho se siente solo. Vamos a tener que darle una conciencia... ¡Y la conciencia de Pinocho tiene que ser un saltamontes! ¿Ves como las cosas no pasan sólo por casualidad?
Dándose cuenta de que el cuento merecía más meditación, él dijo:
-Que visaje... Gozamos mucho bobeando en nuestro pequeño y profundo mundo, que abarca apenas un cuadrito, llamado conversación, creo.
-Usar la imaginación es más que bonito. Es increíble como se vencen las fronteras de ese cuadradito insignificante.
-Si. En este momento veo una nueva profundidad en la ventana.
Después de un rato, surgió en la mente de ella una idea nueva.
-¿Sabes que tenemos que darle a Pinochito? Un deseo.
-Si. Creo que ese deseo cobra la vida de Pinocho...
-¡Que lo pida él! Ahí está su estrella.
Se hacía cada vez más tarde, y ya sin nada más por hacer ella resolvió despedirse por la noche.
-Bueno, creo que me tengo que ir a dormir. Creo que nunca me voy a olvidar de Pinocho, es gusanito medidor que quería ser de verdad, cuya conciencia era un saltamontes, y cuya estrella no titilaba... Debió ser un planeta entonces. Pobre Pinocho, no le va a servir el deseo!
-Jejejeje.
Pero antes de irse, ella reclamó permiso para escribir sobre la ocasión, y él, muy sobrio le contestó:
-Con más que gusto, y derecho. Yo lo haría pero no se... Yo lo escribiría todo raro, y solo lo entenderíamos tú y yo. Mientras que tú, si tú lo escribes, lo entienden todos. Pero nosotros, nosotros lo valoramos, porque lo vivimos.
Pocos minutos después de darle las gracias ella volvió para decir,
-No, ¡No puedo cerrar la conversación! ¡Pobre Pinocho!
-Jajaja. Pues cerrémosla los dos a la vez... Había una vez..
-¡No! ¡Pobrecito! Los cuentos deberían terminar con "hubo esa vez..."
- Será matarlo entre los dos. Que nos acusen a los dos. Y nos vuelvan a encerrar.
-En serio no puedo cerrarla!
-Que nos vuelvan a encerrar en una ventanita, tan pequeña como la de esta conversación, y así volveremos a imaginar.
-Hay una escena en la película en que a Pinocho lo encierran junto a Pepito, cuando los atrapa el titiritero malo... Mira que estoy demasiado conmovida.
-Voy a verme de nuevo Pinocho.
-No quiero cerrar la conversación, pero también temo alargar demasiado el momento.
-Subí la conversación y se sigue moviendo! Pensé hasta grabarlo con el celular de mi hermana, pero creo que no, mejor no.
-¡Si! Yo también he subido varias veces. Mejor no grabarlo, al fin y al cabo son sólo palabras y un garabato de línea verde...
-Creo que lo verdaderamente importante, ya lo grabé en otro lugar.
-Creo que somos nosotros, y el momento los que le damos vida, nada más.
-Bueno, es la hora. Es la hora.
A pesar de haber plantead la despedida, ninguno de los dos lograba despegarse del computador todavía. La conversación cayó en silencio hasta que ella exclamó alarmada:
-¡No! ¡Creo que lo maté! ¡MATÉ A PINOCHO!
Bueno, apenas leí eso, yo lo rematé. Creo que somos igual de culpables.
-Es que lo copié, ¡Y ya no se puede mover!
-Yo cerré la ventana. A penas vi eso de matar.
-Ahora me da miedo subir. ¿Por que qué tal que ya no se mueva? O peor, ¿Que tal que si se mueva, y el otro no?
-Cierre la ventana. ¡Yo lo hice! ¡Vámonos, vámonos! No se si sea lo correcto pero yo me voy.
-OK, vale. ¡Chao! ¡Subiré a despedirme de Pinochito!
-Yo no lo hice...
Y Este último renglón llegó con un tono agregado de tristeza y arrepentimiento. A lo cuál ella agregó:
-¡LO MATAMOS EN SERIO! YA NO SE MUEVE... Parece que se demoró en llegar el Hada Madrina.
La existencia de Pinochito el gusanito medidor es más real de lo que parece.
Nada aquí es inventado, todo sucedió, todo fue plasmado a través de dos teclados.
Gracias a Chula por ayudarme, acompañarme, y por sostener mi mano
aún cuando nuestra imaginación amenazaba con tragarnos enteros.
Aquí
domingo, febrero 25, 2007
Febrero
jueves, febrero 22, 2007
Me encantan los guayacanes rosados. Son árboles muy especiales que florecen pocas veces al año, y cuando lo hacen, pierden todas sus hojas y las cambian por flores. Se convierten en copetes de algodón de azúcar. Lo más bonito es que todos se ponen de acuerdo para florecer al mismo tiempo, y teñir la cuidad de rosadito, por que a cada esquina que doblas ves uno. Esperan majestuosos a que venga la lluvia y tumbe al suelo sus florecitas y al formar un tapete en el suelo sólo me recuerdan de que a veces no solo es bonito ver algo surgir, es casi más especial verle caer con tanta belleza. Me enamoran.
Me gusta San Valentín. Celebrar el amor y la amistad se puede hacer todos los días, pero se siente el doble de especial cuando hay un día designado. Desde mandar Candy-Grams en el colegio, hasta la decoración de la fiesta y jugar con corazones de colores en mi pared Pop Art, me hace sonreír. La fecha pinta un corazón aún más brillante en el rostro de las personas.
Hice brownies. Quedaron deliciosos. Jugue con mantequilla y todavía quisiera poder relamerme los dedos. ¿No les da envidia? Pocas personas se han podido quejar de mis brownies. Y sin embargo mantuvo un tono nostálgico, puesto que mi empleada se casa, se va, y probablemente es la ultima vez que me ayudara a incorporar los huevos. Ese sentimiento debio ser el ingrediente especial que hizo que esta vez sobre-crecieran y se regara masa por todo el horno, un tanto caótico y toda la casa olía a quemado.
Es loco el clima. Un minuto tu ropa esta húmeda de sudor, al siguiente está más húmeda de lluvia, o mejor dicho de aguacero. Mientras hace calor basta con tener una limonada y hielos que refresquen, pero el otro día hizo tanto frío en la Mesa que alcance a pensar que me iba a dar gripa. La neblina cubría el lago, e inclusive a una persona parada a cinco metros de distancia. Era un romance frío entre ellos dos, siempre divididos por el viento que la llamaba a ella hacia la lejanía. Densa y misteriosa, tentaba a los mortales a probar un cucharada de aquella mágica poción. No hubo sol ese domingo, por que al parecer el cielo tuvo una mala noche, la luna desapareció y lo dejo tan mal que no quiso salir de la cama al día siguiente.
Desde ya estoy preparándome para evaluaciones acumulativas, que vienen la próxima semana. No estoy demasiado entusiasta de sentarme durante horas en una silla tiesa de madera chueca a escribir exámenes. Pero más que todo, todavía se me derrama la idea de resumir meses de trabajo en dos o tres hojas de respuestas durante dos horas. Sin embargo no me puedo quejar, o por lo menos no hasta que alguien invente otro sistema educativo. Esto también es especial, por que no pasa todas las semanas.
Y que no se me olviden los tres cumpleaños seguidos, por que es como si en esta epoca todo se celebrara al triple.
No sería justo tampoco dejar pasar desapercibida la luna que últimamente resolvió teñirse de anaranjado, asi como las señoras se tiñen el pelo de rojo. Se rehusa a trasnochar y a las 11 ya la vez empijamada, pero mientras cuelga mas arribita del horizonte juega a ser un tajo de mandarina, o la sonrisa del gato de Cheshire. La vez y no puedes hacer mas que intentar igualar esa sonrisa traviesa. No se qué será pero nunca la habéa visto así antes, y cuando lo hago me inunda una energía que probablemente bastaría para alcanzarla. No sólo es especial, es hermosa.
Creo que deben haber muchos otros momentos que ya se colaron entre el tiempo y de los cuales no podré escribir, pero para finalizar quiero decir que alguien cometió un grave error al quitarle esos dos o tres días a Febrero. Ese cierre de veintiocho solo me recuerda que las cosas buenas usualmente no duran lo suficiente.
Si el cielo se derramara...
lunes, enero 29, 2007
Horas después, con la toalla enrollada buscaba entre mi closet algo medio bonito, como para no sentirme tan feita. Pero otra vez había olvidado lavar mi ropa. Quise que tú no te hubieras olvidado de mí.
Salí a la calle arrastrando los pies y decidí ir a buscar un café. No había ido muy lejos cuando empezó a llover, muy suavecito. Traté de aligerar mi paso pero mi cuerpo no estaba de acuerdo. Con mal abrigo empecé a sentir más frío a medida que la lluvia aceleraba, pero una parte de mi estaba resuelta a seguir caminando despacito, mojándome. Mire hacia el cielo, de nuevo pensando en ti. Las gotas cada vez más gruesas y pesadas saludaron mi frente. Pensé que era bonito, y por un momento no supe si las gotas entraban o salían de mis ojos.
Pronto llegué a mi destino, pero no quería dejar atrás el camino. Me senté y pedí mí cafecito. La terraza del sitio estaba casi desierta, pero yo quería sentir mis cachetes quejarse congelados. Quería ver la lluvia caer, ya casi hecha diluvio. Quería que mis pensamientos bailaran al compás de las gotas, estallando frenéticamente con el asfalto de la calle. Quería que tú me quisieras.
Estuve ahí sentada un buen rato. A pesar de que me quemé la lengua con el café y poco lo disfruté. Desde chiquita había aprendido a no tomar con el pitillo de revolver, pero al parecer no pensé o lo olvidé. ¿Cuantas advertencias no recordamos hasta que ya es demasiado tarde? Llovió por más de una hora, y yo poco me moví. Pero por dentro, mi cabeza llovía también con recuerdos, más que todo tuyos.
Aprendí que así el cielo se derramara, yo seguiría pensando en ti. Y tal como la Gallinita Trula, recogí mis cosas y volví a casa, porque así no contestaras, te quería llamar.
Hail
martes, enero 23, 2007
It's eyes turning pale,
Like the moan of a whale
Brought by the night's gale,
The phantom's grim wail
Came packed in the mail.
The cat's warning failed,
And so ends my tale.
The Storm
martes, enero 16, 2007
Never had our hearts dueled against such a mighty Tempest. Despite the continuous barks of encouragement from the captain, the men felt insignificant and powerless. Expressions of doom shadowed their tense faces. Our boat flinched with every strike from our enemy: the Elements. We felt like slaves sold to an unmerciful master, vulnerable, stumbling at the edge fo our defenses. Yet none of us lacked determination. An intrepid energy inside our tenacity kept us undaunted. The captain arbitrated our every move; but our instincts were stronger and most decisions were made as blood rushed and threatened to break out of our pulses. We had to fight, we wanted to fight. We had to dwell amidst the penetrating chill of wind and water, gust and splash. The promise of serenity vibrated inside our veins. Our hoping candles flickered. Would the glade and the flood extinguish their blaze?
The riot went on, past the hours of twilight. Many had drowned, their stuggling breaths wiped away, swallowed by an unforgiving sea. The sun shone smiles as some of us greeted the ethereal success of morning. Our flawling bodies were heavy with exhaustment, but out faulting hearts were heavier with sorrow. The battle had been ruthless, but surviving it would be worse. We would now be forever scarred and cursed as debris. Our minds were doomed before the tormenting sight of damp hands slipping away into the hungry mouth of the Tempest. Daylight brought not peace, it only uncovered the chaos neglected under the unyielding storm. Lives had vanished, like sugarcubes melted away by the rain.